Descubre la historia del Cremallera de Núria

Si volvemos a principios del siglo XX, la Vall de Núria era un lugar de reposo y misticismo situado en un lugar aislado y solo accesible a pie debido al lugar geográfico donde se encuentra.

Durante aquellos tiempos, la Vall de Núria se volvió un lugar frecuentado por el aumento de peregrinos y personas que acudían por el crecimiento de los deportes de invierno y también por el santuario para venerar la Mare de Déu de Núria, y todo ello hizo necesario para las personas la creación de un medio de transporte que mejorara su accesibilidad.

Debido a esta necesidad, se comenzó a trabajar con diferentes proyectos donde se propuso la creación de un funicular, un teleférico o la prolongación de la carretera desde Queralbs. Pero no fue hasta 1924 en que la sociedad de Ferrocarriles de Montaña a Grandes Pendientes (FMGP), gestora del cremallera de Montserrat, planteara la construcción de un ferrocarril cremallera. Así que después de las dificultades de su construcción, en el año 1930 llegó la primera locomotora a Núria y el 22 de marzo de 1931 se inauguró su línea.

El cremallera sin lugar a dudas tiene el honor de ser el ferrocarril de España construido a más altitud. El primer recorrido del cremallera fue de doce kilómetros y permitió unir los términos municipales de Ribes de Freser y Núria. Su construcción fue muy difícil de ejecutar al tener que hacerse en un medio físico poco agradecido y en una época donde las herramientas de construcción no eran tan sofisticadas.

A pesar de las adversidades con las que se encontraron en este proyecto, cabe destacar que trabajaron más de mil personas las que estaban formadas por trabajadores, ingenieros y arquitectos, que lograron realizar este enlace ferroviario.

En aquella época el cremallera, era una obra de ingeniería innovadora y fue un reclamo para los niños, que estaban fascinados por un ingenio mecánico pintado de color azulado que con una facilidad casi mágica, superaba pronunciadas pendientes. Además, los usuarios del cremallera aprovechaban el trayecto para contemplar el espectacular paisaje que se puede observar.

Actualmente, el cremallera es el único medio de transporte que permitió y permite acceder a Núria, podemos decir que es como un cordón umbilical que une la Vall de Núria con la civilización.

Una vez inaugurado el cremallera, el Santuario de Núria un lugar donde solo se podía acceder andando, se volvió un lugar frecuentado por miles de personas principalmente por la peregrinación de visitantes y fieles, así como el rol que tuvo, acogiendo eventos importantes para nuestro país como la redacción del Estatut de Núria justo al año siguiente de su puesta en funcionamiento.

Durante el transcurso del tiempo, el cremallera necesitaba mejoras en el servicio, debido a las pocas inversiones que se habían llevado a cabo en sus infraestructuras e instalaciones que se estaban degradando con el paso del tiempo.

De ahí que, en el transcurso de los años 80, Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya asumió la gestión del tren cremallera, lo que conllevó una inversión continuada en trenes, vías, catenarias y estaciones que nos permite hablar hoy en día de un servicio de calidad de transporte.

Gracias a esta gestión, podemos decir que es una línea de montaña que ofrece unas características técnicas excepcionales que tiene en todo momento el objetivo de ofrecer de la Vall de Núria un referente medioambiental como valle de cero emisiones.

Desde Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC), hemos querido dar a conocer la historia del cremallera de la Vall de Núria, por los años que se lleva trabajando con este medio de transporte, el esfuerzo que hay detrás de las personas que lo hicieron posible y por la facilidad y ayuda que ofrece en la accesibilidad.

En el siguiente vídeo podrás disfrutar de la historia del cremallera de la Vall de Núria explicado de otra manera. ¡No te lo pierdas!